¿Cuándo fue la última vez que escuchaste el clásico sonido del afilador? Este experto en la materia no solo “silbaba”, también era admirado por afilar cuchillos y navajas cuando lo necesitábamos con una destreza descomunal en la chaira y en hacer girar la piedra de afilar.
No basta con elegir la mejor navaja o cuchillo, para poder hacer uso de todas sus propiedades y características es esencial que estén bien afilados. Esto no solo dependerá de la periodicidad con la que afilemos nuestro cuchillo, también existen otras variables, como la retención de bordes, el tipo de acero o el tipo de afilador utilizado, que harán que esta tarea sea más o menos recurrente.
¿Por qué afilar mi cuchillo o navaja?
La primera razón ya ha sido mencionada, pero es fundamental recalcarla. Afilar tu cuchillo o navaja resulta esencial para experimentar al máximo todas sus funciones. Como bien sabes, la función primordial de estos instrumentos es el corte. Carecer de filo o contar con un filo desafilado en un cuchillo o navaja carece de sentido, ¿no crees?
La segunda razón, igualmente significativa, se relaciona con la seguridad. Cuando nuestros cuchillos o navajas pierden su filo o se desgastan debido al uso, nos vemos obligados a aplicar una fuerza excesiva para realizar las mismas tareas, lo que aumenta el riesgo de sufrir un posible accidente. Mantener un filo afilado es, por tanto, garantía de un manejo seguro evitando situaciones peligrosas.
Tipos de afiladores
Piedras de afilar
Este primer tipo de afilador es el más empleado por los profesionales del sector y personas con experiencia, ya que teóricamente proporciona un afilado de mayor calidad.
Estas piedras de afilar se distinguen por presentar diversos grados de abrasión según su grano. Comúnmente, el grano más grueso se utiliza para conformar el filo inicial, mientras que el grano más fino se emplea para ajustes más detallados o delicados del filo. Esta versatilidad en la elección del grano permite obtener resultados óptimos en el afilado de cuchillos y navajas, convirtiéndolas en una herramienta indispensable para lograr el rendimiento deseado en cada tarea.
Chairas
Las chairas son afiladores ampliamente empleados, especialmente para mantener afilados los cuchillos de cocina, aunque también pueden afilar todo tipo de cuchillos o navajas. Estas herramientas se caracterizan por su forma cilíndrica y cuentan con un mango de agarre en uno de sus extremos.
La chaira destaca por su sencillez de uso, lo que la convierte en una opción muy práctica para afilar tus cuchillos o navajas y tenerlos siempre a punto. Además, su diseño compacto permite que ocupe poco espacio en la cocina.
Dominar la técnica adecuada para utilizar la chaira te permitirá resolver eficazmente los problemas de afilado en poco tiempo.
Afiladores de bolsillo
Los afiladores de bolsillo son una solución ideal para quienes desean afilar sus cuchillos o navajas de forma rápida y sin importar su ubicación, ya que han sido especialmente diseñados para ocupar el mínimo espacio. Su uso es prácticamente igual a afilar un cuchillo o navaja con piedra, pero en versión reducida.
Estas prácticas herramientas suelen contar con dos ranuras: una destinada al afilado y otra con una parte de cerámica para retocar el filo. En algunos casos, también incorporan un utensilio para afilar cuchillos o navajas de filo serrado, lo que los convierte en una herramienta versátil y completa para mantener todas tus hojas afiladas y listas para su uso en cualquier momento y lugar.
Afiladores eléctricos
Este ultimo tipo corresponde a herramientas de afilado que funcionan de forma automática, con electricidad o a pilas. Los afiladores eléctricos son fáciles de utilizar, pero no ofrecen el mismo control que los afiladores manuales por lo que se desaconseja su uso a personas no profesionales o con amplia experiencia.
Cómo afilar cuchillos o navajas paso a paso
Afilar cuchillo o navaja con piedra de afilar
- El primer paso del proceso consiste en humedecer la piedra de afilar con agua o aceite para asegurar una superficie adecuadamente lubricada.
- A continuación, seleccionamos el ángulo más apropiado y deslizamos la hoja del cuchillo o navaja a lo largo de toda la piedra, aplicando una presión constante.
- Una vez que hayamos afilado una cara de la hoja, procedemos a girar el cuchillo para realizar el mismo proceso en la otra cara. Es fundamental mantener el número de pasadas idéntico en ambas caras, así como garantizar una presión constante y un ángulo uniforme durante todo el proceso.
Afilar cuchillo o navaja con chaira
Si deseas aprender cómo afilar tus cuchillos o navajas con una chaira, el proceso difiere ligeramente. Inclina suavemente la chaira hacia arriba, apoyando el extremo sobre una superficie de trabajo con el mango hacia arriba.
- Sostén tu cuchillo o navaja con un ángulo de aproximadamente 20 grados y colócalo con el filo hacia arriba, evitando posicionarlo hacia abajo.
- Desliza la hoja en un movimiento de barrido a lo largo de la chaira, manteniendo una presión constante y sin separar el cuchillo o navaja de la superficie de la chaira.
Una vez que hayas afilado una cara de la hoja, repite la misma operación en la otra cara, asegurándote de mantener el mismo ángulo y presión constantes.
¿Qué ángulo de afilado debo utilizar?
El ángulo es algo muy importante a la vez que difícil de conseguir cuando queremos afilar cuchillos o navajas. Cuánto mayor es el ángulo de afilado, mayor es la robustez del filo; cuánto menor es el ángulo, más poder de corte tendremos.
En la actualidad, esta dificultad se ha reducido ya que existen afiladores con ranuras que ajustan el ángulo, como el Spyderco Tri-Angle Sharpmaker, con el que podrás afilar tu herramienta que más te convenga:
- Ángulo de 17º: Se trata de un filo muy afilado a la vez que delicado. Este ángulo se utiliza, sobre todo, en hojas de afeitar o similares.
- Ángulo de 20º: El más utilizado. Ofrece grandes ventajas de corte y precisión, sobre todo en cuchillos de cocina o para filetear.
- Ángulo de 25º: Perfecto para cuchillos o navajas que necesitan un filo resistente. Perfecto para cuchillos o navajas de caza o de montaña.
- Ángulo de 30º: Es un filo muy común en cuchillos o navajas destinadas a cortes en materiales muy duros o pesados como madera o alfombras. Es el filo recomendado para cuchillos o navajas de rescate o salvamento.